La deliciosa gastronomía de Santa Pola, especialmente en lo referente a arroces de todo tipo, sumado a que cuenta con las mejores playas del litoral alicantino y la proximidad con la isla de Tabarca, consigue atraer a los visitantes que buscan las casas rurales más próximas al casco histórico y al paseo marítimo, no demasiado lejos del casco urbano.
El alojamiento perfecto, amplio, con mejoras en cuarto de baños, que no están en las fotos. La anfitriona super amable, y servicial, gracias Sara. La zona donde está ubicado perfecto está en todo en centro y cerca de la playa y de todo. Le doy un 10