La ciudad se viste de rituales tan fascinantes como estremecedores durante la conmemoración de la pasión, muerte y resurrección de Cristo. La Semana Santa en Palma de Mallorca es la más emblemática de la isla, con tradiciones espirituales que conjugan elementos narrativos y estéticos. Los amantes de la cultura y los creyentes disfrutarán de los pasos, llenos de simbología e imágenes poderosas.
El Domingo de Ramos las cofradías están preparadas para salir a las calles en conmovedoras procesiones. Los conventos e iglesias son los puntos de partida para dejar aparecer por primera vez a los penitentes, que caminan por las calles, sosteniendo piezas significativas como cruces, cirios y estandartes. El Jueves Santo está dotado de una esencia solemne, ya que los fieles visten con túnicas y capuchas cónicas. Sus hombros y espaldas cargan estatuas de gran peso, a cambio de bendiciones.