Situada al norte de Portugal, en la ciudad de Oporto se respira cierto aire de decadencia paseando entre sus viejos callejones, contrapuestos por sus barrios elegantes. La ciudad ofrece al viajero la posibilidad de alojarse en cualquiera de sus múltiples apartamentos. En Oporto existen numerosos alojamientos y alquileres vacacionales, lugares donde se puede descansar por muy poco dinero aunque con todas las comodidades necesarias.
Bien equipado y todo bastante nuevo, armarios enormes y cama muy cómoda. Aún estando justo al lado de una carretera bastante transitada, está muy bien insonorizado. e Eso sí, en Agosto se echa de menos el aire acondicionado. Intentamos conectar a la wifi pero no hubo manera, señal muy débil. Situado no muy lejos del centro, en un barrio tranquilo, con el autobús prácticamente en la puerta y el metro bastante cerca. La comunicación con la agencia, bien. Un detalle que nos dejaran una botella de vino en la bienvenida.