Destinos perfectos para hacer turismo activo
Una variante del típico turismo de playa o montaña es el turismo activo. Se trata de una manera de viajar cuyo principal motivo es poder realizar actividades en entornos naturales, ya sea de observación como de esfuerzo físico. Lugares como Escocia, Noruega o Francia ofrecen al viajero la posibilidad de vivir una experiencia única haciendo deportes al aire libre que conllevan un cierto nivel de riesgo, aunque siempre controlado. Las Tierras Altas de Escocia o Highlands, como también se las conoce, están consideradas un verdadero imán para aquellas personas que les gusta descargar adrenalina a raudales. En este escenario único se puede disfrutar de actividades como barranquismo, escalada de muros, descenso de rápidos, deportes de nieve, y como no, una excursión hasta el lago Ness para intentar ver a su monstruo, mundialmente conocido. La Provenza es otro de los destinos preferidos por quienes van a realizar turismo activo, gracias a toda su costa repleta de playas y calas. Aquí practicarás kite surf, montarás en veleros y harás snorkel o submarinismo. Al norte del mar Adriático se encuentra la ciudad de Lika Senj, hasta donde llegan cada año numerosos creyentes y montañeros en peregrinación para visitar en el Parque de Velebit, el santuario marino de Ntra. Sra. de Krasno. También es recomendable visitar Tromso, una ciudad ubicada a poco más de 300 km del Ártico y donde se puede disfrutar de diferentes actividades durante todo el día, especialmente desde mayo hasta julio, temporada en la que el sol brilla continuamente. Navegar en kayak, pasear en trineos tirados por perros, hacer senderismo o un safari para divisar ballenas son algunos de los atractivos de este lugar.