Los mejores destinos para una escapada de fin de semana
Las siguientes ciudades son lugares perfectos para un fin de semana porque se ven rápido, están cerca y cuentan con una riqueza cultural única. ¡No te las pierdas!
Las siguientes ciudades son lugares perfectos para un fin de semana porque se ven rápido, están cerca y cuentan con una riqueza cultural única. ¡No te las pierdas!
Pasar un fin de semana en Madrid es una idea llena de posibilidades. Puedes llegar y optar por disfrutar de la noche madrileña para olvidarte de cualquier preocupación o también puedes enfocar tu viaje a visitar lugares culturales como los museos Reina Sofía y El Prado. Pasea por El Retiro o, simplemente, saca una entrada para un musical en los teatros de Gran Vía y luego cena en algún restaurante cercano. El plan es lo de menos, ya que Madrid tiene mucho que ofrecerte.
Un fin de semana te bastará para caer rendido ante Granada. Sube a la Alhambra, recorre los jardines del Generalife como un rey nazarí o piérdete por los estrechos callejones del Albaicín. Granada es una ciudad única en todo el mundo y no te va a dejar indiferente, así que aquí tienes esa escapada perfecta que andabas buscando para tu próximo fin de semana.
Hay pocas, muy pocas ciudades en toda España que sean capaces de competir con la belleza de Salamanca y con su historia. Sede de una de las grandes universidades del país, el ambiente estudiantil se combina con lugares como la Casa de las Conchas, sus dos catedrales o una Plaza Mayor que te aconsejamos visitar de noche para verla completamente iluminada.
Un fin de semana en Barcelona es suficiente para entender qué lleva a millones de viajeros cada año a detenerse aquí. Un plan que siempre puedes hacer, aunque estés pocos días, es pasear por las Ramblas y visitar la Sagrada Familia. También te aconsejamos entrar a algunos de los museos de la Ciudad Condal o dejarte caer por el cercano Monasterio de Montserrat.
La capital de la Costa del Sol es una de las joyas del sur de Europa. Playas increíbles, un centro histórico para enmarcar y una oferta cultural que cuenta con museos como el Pompidou, el Thyseen o el Picasso. Si eres más de gastronomía, intenta probar los tradicionales espetos de sardinas si vas de mayo a agosto, o cualquier otra especialidad que haya salido del mar, y es que el pescado en Málaga es un bocado digno de dioses.