Guadix es conocida como la capital europea de la cuevas por sus más de 2 000 casas subterráneas esparcidas por los cerros que abrazan la localidad. Pero estas casas cueva, como dicen los guadijeños, no son meros huecos en la arcilla. Al contrario, son muy confortables, tranquilas y se mantienen a una temperatura perfecta todo el año.
La casa- cueva está muy bien, con todos los detalles y utensilios, camas muy confortables, jacuzzi espectacular. Muy cerca de supermercado (vas andando). Los dueños nos atendieron muy bien y explicaron los lugares de interés, además de sitios con comida buena y económica. Hemos estado el puente bastante relajado. Nuestro internet( lógicamente por ser cueva) con poca cobertura, pero mejor así para desconectar, no preguntamos si tienen wifi. Tiene varias terrazas con vistas muy bonitas de las montañas. Muchas gracias por todo.