El Saler permite descubrir la costa valenciana a través de sus bellos parajes naturales, sus apartamentos llenos de encanto, su gastronomía y, por supuesto, sus deliciosos vinos, que son la mejor manera de conocer el auténtico sabor de esta joya secreta del Mediterráneo. Situada en pleno Parque Natural de la Albufera, esta pequeña localidad costera con menos de 2000 habitantes es uno de esos lugares privilegiados a los que hay que ir al menos una vez en la vida. Así, los amantes del mar y la naturaleza apreciarán la biodiversidad de La Dehesa del Saler, un espectacular enclave natural formado por frondosos pinares, playas silvestres y dunas de arena.
Su interior está repleto de rutas de senderismo de baja dificultad que se pueden recorrer a pie o en bici y son aptas para familias con niños y personas con movilidad reducida. En verano, la espectacular playa de El Saler cobra protagonismo, atrayendo a los fans de deportes acuáticos y a quienes huyen de las aglomeraciones turísticas. Protegida de los vientos por un cordón de pinares y dunas, es perfecta para darse un relajante baño, practicar windsurf o disfrutar de un tranquilo paseo en barco.