Al norte, la Pineda es la playa más extensa de Castelldefels. Se distingue por sus dunas y variedad de flora y fauna. También es famosa por ser un destino ideal para practicar kitesurf. En esta ciudad una buena opción es visitar sus alrededores, como el centro histórico con sus edificios antiguos. Allí podrás visitar el castillo de Castelldefels, construido en el siglo IX, o ir a la cercana iglesia de Santa María de Castelldefels, de estilo románico bizantino. Los lugares en esta zona se caracterizan por sus monumentales torres de vigilia, que en la antigüedad formaban parte de la seguridad del castillo.
Es la playa más pequeña de Castelldefels y se ubica en el centro del paseo marítimo. Excelente para refrescarse o realizar actividades acuáticas, sobresale por su área de dunas. Un plan para hacer con niños en esta área es combinar día de playa con un paseo en bicicleta por el malecón. Y para los amantes de los deportes acuáticos, la mejor opción es ir al Canal Olímpico que se construyó con motivo de los Juegos Olímpicos de 1992. Un lugar excelente para andar en kayak o practicar piragüismo.
Situada al sur de la ciudad, Baixador se ubica a pocos pasos de la estación de tren. Esta playa extensa, de aguas transparentes, es perfecta para nadar, caminar o andar en windsurf. En las proximidades, el puerto deportivo también es una buena opción para realizar deportes acuáticos. Si disfrutas de hacer senderismo o andar en bicicleta de montaña, una gran alternativa es ir al parque natural del Garraf. Existen distintos circuitos para explorar y admirar su grandiosa geografía de bosques y montañas.
Siguiendo el paseo marítimo hacia Gavá del Mar, se encuentra la playa Gavá. Solitaria y tranquila, es el mejor lugar para descansar, correr o caminar. En los alrededores podrás visitar el museo de Gavá con un importante patrimonio histórico, o las minas prehistóricas de Gavá-Can Tintorer, una de las más antiguas de Europa.
Se ubica en el camino hacia Tarragona y está rodeada de rocas. Está considerada dentro de la playa Ametlla de Mar, que es una cala no demasiado extensa pero maravillosa para bañarse. Íntima y tranquila, su cercanía con Tarragona es la mejor excusa para conocer esa ciudad. Allí es indispensable visitar el circo romano, el anfiteatro o la catedral de la ciudad.
También en Ametlla de Mar, cala Cementeri es contínua a cala Bon Caponet. Aunque es pequeña, vale un paseo por su playa de arena y roca. Su acceso no es riesgoso y se encuentra señalizado.