La playa de Valdearenas se encuentra en este espacio privilegiado. Se trata de un parque natural con un entorno dominado por dunas, las más valoradas en todo el país por su valor ecológico. Aunque sea para tomar una foto con los niños, merece la pena visitarlas.
Este espacio protegido es una de las joyas del ecosistema cántabro. El avistamiento de aves es una práctica habitual en este parque natural, donde vuelan águilas pescadoras, ostreros, zarapitos, escribanos y espátulas. La temporada de migraciones es, obviamente, el mejor momento para visitar las marismas.
Planea una escapada de senderismo para toda la familia en una reserva de la biosfera con lugares de postal, como la "senda de los osos" o los Lagos de Covadonga. En los Picos de Europa hay miradores impresionantes. Desde algunos incluso se puede ver la costa cántabra.
En Penagos se encuentra uno de los parques de animales más importantes de España, con especies de todo tipo(cebras, gorilas, jirajas, papiones, hipopótamos...). Sus actividades enfocadas a la concienciación y la conservación son más que recomendables para los críos.