El monumento más conocido de Berlín, la Puerta de Brandenburgo, ejerce de epicentro oficial de la Nochevieja berlinesa. La festividad, conocida como Sylvester en alemán, reúne a miles de personas ante esa puerta. Tras la llegada del nuevo año, en los alrededores, en la zona del parque Tiergarten y de la Columna de la Victoria, se organizan conciertos en directo.
El olor a canela recorre Berlín durante la Navidad. Así, con canela, especian el característico glüwein, el vino caliente que te ayudará a sacudirte el frío. Lo encontrarás en todos los mercados navideños.
El codillo es el plato estrella de la gastronomía alemana durante las Navidades. Si eres más de dulce, te recomendamos las típicas manzanas bañadas en chocolate, el lebkuchen, que lleva miel, frutos secos y jengibre, o el tradicional pan dulce, que se conoce como stollen.
Los berlineses celebran la Navidad a lo grande. Como muestra, los gigantescos árboles con los que decoran algunos de los puntos más emblemáticos de la ciudad: la Puerta de Brandenburgo, el Checkpoint Charlie o la Potsdamer Platz.